A partir de la información aportada por el cliente, ya sea en plano 2D, geometría 3D, o muestra física, los moldes son proyectados por nuestro departamento técnico, y construidos en talleres auxiliares bajo nuestra dirección, empleando aceros de primera calidad, en función de los requerimientos de cada pieza.
Una vez finalizada la fusión, los moldes son desmontados, limpiados mediante chorro de arena, y engrasados, garantizando así un buen estado de conservación y asegurando una calidad constante.